Ciclidos del Rift Argentina
Primera web dedicada Ãntegramente a los ciclidos del gran Valle del Rift africano en Argentina
Neolamprologus multifasciatus (Boulenger, 1906)
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Catalogado como el ciclido más pequeño del mundo, el Neolamprologus multifasciatus,"multi", como se lo llama cariñosamente, es uno de los ciclidos africanos para aquellos aficionados que quieran mantener un acuario de
pocas dimensiones.
Su comportamiento de colonia y su prolificidad reproductiva, hace que sea uno de los ciclidos africanos del lago Tanganyika con mayor aceptación por los amantes de los “conchicolas”. En este informe comentaremos sobre sus características en general y su comportamiento.
La etimología de su género y especie proviene de las palabras en griego para su género Neolamprologus: neos = nuevo, lampros = antorcha y lagos = liebre Para su especie multifasciatus: Multi = multiples y fasciatus = rayas (barras).
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HÁBITAT
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Esta especie es endémica del lago Tanganyika, situado en el Valle del Rift africano.
Habita las costas de Zambia, más precisamente en las bahías de Ndole, Niamkolo y Musende y cabo Chaitika.
Prefiere zonas arenosas con formaciones de conchas
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CARACTERÍSTICAS
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Los machos de esta especie alcanzan una longitud total máxima de 4,5 cm. y las hembras de 2,5 a 3 cm.
Su lÍbrea es de un color grisáceo de fondo y varias líneas verticales de un color más oscuro.
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COMPORTAMIENTO Y MANTENIMIENTO EN EL ACUARIO
A falta de tamaño, su actitud y comportamiento son increíbles. Aunque parecen vulnerables pueden tornarse agresivos
y cambiar el carácter para defender sus territorios y colonias, muchas veces se los puede ver hacer frente a peces mucho más grandes y poseen una gran velocidad.
El N. multifasciatus vive en las conchas vacías de caracoles Neothauma tanganyicense.
Un macho establecerá su territorio alrededor de varias conchas y atraerá a varias hembras para vivir junto a él en éstas conchas, formando una pequeña colonia en su área.
Literalmente viven en las conchas; duermen en ellas, se refugian en ellas cuando se encuentran en peligro, y crían sus alevines en ellas. También, si no encuentran territorio para generar sus colonias alrededor de conchas de caracoles, estos pueden habitar zonas rocosas, utilizando como hábitat las zonas bajas contra el sustrato y generando sus escondites entre la arena y las rocas como lo hacen ejemplares encontrados es Cabo Chaitika.
La generación de sus territorios es algo muy particular en esta especie. Las conchas no son enterradas como lo hacen otros conchicolas, sino que cavarán un pozo dentro y alrededor del la formación de caracoles.
Para hacerlo, comenzarán recogiendo arena con la boca de los costados de las conchas, nadando lejos de estas y dejándola caer. Una vez que hayan logrado liberarla, seguirán hasta debajo de ellas, balanceando el cuerpo de un lado a otro. Se forma una nube de arena mientras se abren paso por debajo del caparazón y salen por el otro lado.
Repiten estos pasos hasta que la dejan apoyada en el vidrio del fondo del. No importa qué tan profunda sea la capa de arena, siempre llegan hasta dejar el vidrio a la vista, y forman una montaña de arena en los costados. Esto lo hacen para esconder
totalmente su área de cría, y que no sea vista por depredadores. También se los puede ver levantando y moviendo piedras, conchas, o cualquier elemento que ellos crean indeseable, y pueda “ensuciar” el territorio.
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En lo posible, la arena fina es el mejor sustrato si se quiere verlos tener este comportamiento. Cuando terminen de decorar, cada concha estará en medio de un cráter de unos 10 cm de diámetro.
Los machos y las hembras defenderán este territorio contra todos los intrusos, incluso de peces que pueden medir varias veces su tamaño.
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Los N. multifasciatus deben mantenerse en lo posible solos o con peces que no puedan convertirse en sus depredadores,
con parámetros de agua que intenten replicar su hábitat natural. Temperatura entre los 24-26ºC, dureza de agua entre
15-20 dH y un pH alrededor de 8,0 y 9.
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Como comenté anteriormente, sustratos arenosos finos son fundamentales para decorar el acuario, las conchas a utilizar deben ser acordes a sus tamaños para no correr el riesgo de que queden atrapados dentro de ellas, así mismo no deben utilizarse caparazones espiralados en su interior.
Pueden utilizarse rocas para delimitar territorios y de ser posible usar una iluminación tenue.
Si quiere mantenerse con otros peces el acuario mínimo será de 200L. para que puedan delimitar bien su territorio. Compañeros adecuados sería otras especies de conchicolas que no generen colonias, como Lamprologus ocellatus, Lamprologus meleagris, etc.
La filtración del acuario debe ser óptima, ya que agradecen aguas claras y son muy delicados en cuanto a los parámetros
de agua.
En cuanto a su alimentación, es una especie omnívora. En sus hábitats naturales el Neolamprologus multifasciatus se alimenta de zooplancton y pequeños crustáceos. En el acuario aceptan todo tipo de alimentos ya sean en escamas o gránulos. Es fundamental variarles la alimentación y ofrecerles alimentos vivos como artemia eclosionada, cyclops o daphnia, ya que les da una buena cuota de proteínas y hace que su crecimiento sea óptimo.
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REPRODUCCIÓN
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Cuando una hembra está lista para reproducirse, limpiará 2 o 3 conchas de la zona donde habitan.
Al acercarse el momento, la hembra llamará al macho con movimientos muy rápidos de su aleta caudal, lo rodeará, y se las puede ver también darle pequeños mordiscos para atraerlo.
Una vez que el macho accede, la hembra se introduce en la concha elegida depositando los huevos: el macho puede entrar a fertilizarlos con ella dentro si hay espacio para los dos, si no, entrará el solo y hará su trabajo.
Una vez finalizado el proceso, la hembra alejará al macho y quedará al cuidado del desove.
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Los huevos son protegidos hasta que los alevines se desarrollan. Al principio, las crías se quedarán en el caparazón, luego,
a medida que se animan a ver el exterior, se mantendrán cerca de la concha y se irán animando aún más a alejarse de ella
mientras que se hacen más grandes, siempre al cuidado de su madre.
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Dado que las hembras son tan pequeñas, las crías contendrán solo unos pocos alevines. Y dado que los huevos se depositan dentro de la concha, el primer signo de actividad se da cuando los alevines la abandonan. A medida que crecen, los hermanos mayores no se comerán a los más chicos. Esto permite observar varias generaciones y tamaños de alevines en la colonia.
Una vez que están preparados para valerse por sí mismos se integran al grupo. Al ser una especie muy prolífica, las puestas pueden darse con variación de semanas.
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Autor del artículo: Walter Vázquez
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